Depresión

Infelicidad, culpabilidad, abatimiento, pérdidas de seres queridos, rupturas sentimentales, enfermedades, la vejez … Hay muchas características que acompañan a la depresión y que puedes tratar y mejorar con la terapia Gestalt.

TODO LO QUE NECESITAS SABER SOBRE LA DEPRESIÓN

¿Qué es la depresión?

Según la OMS, más de 300 millones de personas padecen depresión, un trastorno mental que sufren más las mujeres que los hombres y que se caracteriza por provocar desinterés, tristeza, apatía, culpa o baja autoestima. En la mayoría de los casos, suele estar acompañada de ansiedad, otro trastorno bastante habitual.

Si no se trata, la depresión puede agravarse y complicarse. En los peores casos, puede conducir al suicidio. No se trata de un problema emocional serio que esté ligado con la condición socioeconómica o con la edad, pues se sabe que puede afectar a personas de diversa índole, origen, edad o condición.

Se trata de un problema que puede hacer mella en todos los aspectos de nuestra vida, como las relaciones sociales, personales, familiares o laborales. Ello sin tener en cuenta la estigmatización que aún hoy persigue a muchas personas que padecen este problema emocional.

¿Cuáles son las causas de la depresión?

Dependiendo de las causas de la depresión, los síntomas pueden variar, aunque hay una serie de manifestaciones que son comunes a todos los tipos de depresión, síntomas que convierten este trastorno emocional en leve, moderado o grave. ¿No sabes si los síntomas que padeces son depresión? Aquí te cuento.

Procesos de duelos inconclusos.

Profundo sentimiento de infelicidad.

Soledad.

Duelos por rupturas sentimentales.

Distorsión en la relación individual con el campo específico.

Enfermedad propia o de familiares.

¿Cuáles son los tipos de depresión?

La depresión puede ser endógena (depresión mayor), situativa o reactiva, psicógena y somatógena (adictiva). La depresión mayor se desencadena por el desequilibrio de algunos neurotransmisores cerebrales. Es, por tanto, una depresión ocasionada por una alteración fisiológica producida en nuestro cerebro, es decir, no la provoca ninguna causa o suceso externo.

La depresión situativa o reactiva es aquella que está causada por un suceso traumático o un estado de angustia y sufrimiento. Por su parte, la depresión psicógena tiene su origen en la infancia o adolescencia y está vinculada a trastornos como la ansiedad o la neurosis. Finalmente, la depresión somatógena o adictiva es la que aparece debido al padecimiento de una enfermedad o la adicción a alguna sustancia.

La depresión tratada con la terapia Gestalt

Según el concepto holístico de la terapia Gestalt el ser humano es un organismo unificado, así que se le debe tratar en su totalidad. ¿Cómo la trabajamos?

Darnos cuenta del vínculo que tenemos con las situaciones que nos generan sufrimiento.

Reconocer y apoyarnos en los recursos que tenemos.

Vivenciar y aprender nuevas formas personales para afrontar la situación que nos genera depresión.

Vivir y sentir en el presente como fuente de un nuevo auto-conocimiento para poner en marcha los recursos idóneos en cada situación y así gozar de un estado de salud plena.

¿Cómo superar la depresión con Terapia Gestalt?

Comúnmente, para poder superar la depresión es necesario ponerse en manos de profesionales en psicología, puesto que será este profesional el que valore la gravedad del trastorno y recomiende la psicoterapia más adecuada, tratamiento que, en algunos casos, se acompaña de medicación. Con ayuda especializada se puede salir de la depresión.

Desde el punto de vista de la terapia Gestalt, la depresión acontece cuando hay un bloqueo y perdemos la capacidad de contactar con nosotros mismos/as y nuestras necesidades. La solución gestáltica a la depresión que propongo, es a través de las técnicas supresivas, integrativas y expresivas, las cuales permitirán superar los bloqueos y favorecer la auto-realización del cliente.